Hace 60 años exactos, en Argentina empezaba a transmitir la televisión pública. Una tele sin red, donde todo era en vivo. Pero también sin las presiones del rating minuto a minuto. Los trabajadores llegaban desde el universo de la radio y del cine a un territorio virgen.
Durante estos 60 años sucedieron maravillas y desastres. Programas inolvidables. Programas lamentables.
Durante muchos años se mereció el apodo de "caja boba"... pero ya no. Ahora los contenidos producidos para la televisión digital abierta son una fiesta de inteligencia, salud y emoción.
Este blog no será objetivo.
Amo a la televisión digital abierta y quiero contarles por qué.
No me vas a convencer de que vuelva a comprar una tele...naaaaa
ResponderEliminarSos una grosa de todas formas, piba.
¡Salú!
Festejo que sea calidad lo que podamos ver, que sea una tele con cabeza,y creatividad festejo Pakapaka....aunque yo casi no veo tele, por tiempos, opcion...pero cuando la veo me gusta encontrarme con lo que vemos actualmente en la tele publica, y encuentro! VIRGINIA
ResponderEliminarCreo que está bueno agregar a tu perspectiva (todas las perspectivas posibles) que sos una trabajadora de medios. El hecho de ir todos los días a laburar a un medio me parece que enriquece el punto de vista. No miro tele.Espero que me convenzas. Saludos!
ResponderEliminarLau, te felicito y espero que este blog también se pueda convertir en un lugar de intercambio. Beso.
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